Evaluación y correlación clínica de los niveles de Plumbemia, en los trabajadores que elaboran acumuladores eléctricos, para la implementación de medidas de control

Abstract

El ser humano en su continuo andar por el mundo y su incansable saciedad por el conocimiento y sobre todo poder entender y controlar las diferentes fuentes naturales, ha tenido que explorar y usar los recursos que la misma naturaleza le proveen y así salir de la tiniebla y obtener energía reflejada como luz, no obstante en su afán de siempre ir más allá, ha ideado la forma de guardar esa energía para poder ser usada en distintos lugares y en diferentes momentos. De esta manera llegamos a la obtención de los acumuladores eléctricos o también llamadas baterías, en la actualidad a pesar de que la ciencia avanza a pasos agigantados diariamente, es este instrumento el que provee la energía suficiente para realizar muchas actividades sin tener que estar en un punto fijo. Para su fabricación es necesario el uso de materiales como el plomo, el cual ha sido utilizado desde las grandes civilizaciones que se asentaron en el mundo y a pesar de ser un metal que puede provocar daño al hombre, éste le ha permitido desarrollar varias herramientas para su beneficio. En nuestro país también se fabrican acumuladores eléctricos, sin embargo los procesos que se tienen aún son de manufactura, teniendo como resultado un contacto directo con el metal en sus diferentes formas, por tal razón, existe el interés de conocer cuáles son los puntos donde los trabajadores se contaminan más y poder implementar mejoras en beneficio de la empresa y el colaborador. Los resultados encontrados arrojan que el 46% de la población analizada tiene niveles altos de plomo en sangre, lo que nos da una clara idea que en la mayoría de puestos de trabajo existe contaminación de plomo, sin embargo existen tres casos puntuales que deben ser intervenidos como placas, general y ensamblaje, además se observa una relación directa entre el tiempo laboral y los niveles de plomo lo que hace pensar en una exposición continua y contaminación progresiva. También se encontró que el sistema que mayormente se afecta es el sistema nervioso con 108 síntomas, pero algo que ha llamado la atención es que a pesar de tener niveles de plumbemia elevados los colaboradores no presentan cuadros típicos de anemia con los cambios hematológicos respectivos, conservando valores de hematocrito de 48.1mm³ y de hemoglobina de 16.2 mg/dl en promedio. Con este estudio se deja como precedente cuales son los puntos a intervenir en la planta y además abre la posibilidad de realizar nuevos estudios para poder entender la problemática de la plumbemia en la población ecuatoriana y que vive en la altura como en Quito, con lo cual se llegará a un entendimiento más profundo de nuestros colaboradores.