Inconstitucionalidad de los actos administrativos emitidos por funcionarios públicos.- demanda de inconstitucionalidad o recurso de amparo

Abstract

La excelencia de las relaciones humanas se basa en la dignidad del hombre, y de ella emanan ciertos atributos que deben ser reconocidos y protegidos porque, cuando se violan, se lesiona la dignidad del individuo. Los derechos humanos se originan en lo íntimo de la persona y, al mismo tiempo, su reconocimiento es el camino más directo para respetar esa dignidad, por lo que, el respeto y la protección de tales derechos es fundamental para la convivencia del hombre.

Día tras día vemos como en nuestro país los derechos del hombre emanados de nuestra constitución, se ven atropellados e irrespetados.

Es una realidad el hecho de que no existe una claridad jurídica respecto a qué acción corresponde plantear a la persona afectada por infracciones a las reglas que consagran las garantías señaladas en la Constitución Política de la República del Ecuador, realizadas a través de actos administrativos ejecutados por funcionarios del sector público: si la demanda de inconstitucionalidad deducida ante el Tribunal Constitucional; o, el recurso de amparo constitucional.

En cuanto a la presentación, trámite y resolución definitiva por parte del Tribunal Constitucional, en el ejercicio del recurso de amparo, se han patentizado notables contradicciones, provenientes de la incomprensión y desconocimiento de su verdadero sentido, tanto por parte de los actores como de los magistrados, especialmente en épocas que todavía las sentimos recientes y que por fortuna se han ido superando, como se lo demuestra en las resoluciones del Tribunal Constitucional en la presente época.

Ha existido de igual manera, confusión e indebida aplicación del espíritu del recurso de amparo como medio constitucional para lograr el respeto de las garantías de los derechos humanos señalados en la Constitución.

En cuanto al ejercicio y resolución de la demanda de inconstitucionalidad, se podría afirmar que no ha existido mayor controversia.

Es por esto que, solamente con una debida comprensión y aplicación de los medios que la propia Constitución señala, se obtendrá la vivencia de las garantías constitucionales establecidas en la Carta Fundamental a favor de los derechos de la persona y la responsabilidad y custodia de las mismas por parte del Estado, como una respuesta eficaz al clamor social de preservar la norma constitucional en el sitial principal dentro del ordenamiento jurídico estatal, toda vez que ninguna norma de jerarquía inferior puede contradecirla y por ende las manifestaciones unilaterales de autoridad pública deben guardar absoluta armonía con el ordenamiento constitucional y legal.

The excellence of human relations is based on the dignity of man, and from it emanate certain attributes that must be recognized and protected because, when they are violated, the dignity of the individual is injured. Human rights originate in the intimate of the person and, at the same time, their recognition is the most direct way to respect that dignity, therefore, respect and protection of such rights is fundamental for the coexistence of man.

Day after day we see how in our country the rights of man emanating from our constitution, are run over and disrespected.

It is a fact that there is no legal clarity as to what action corresponds to pose to the person affected by infractions to the rules that enshrine the guarantees indicated in the Political Constitution of the Republic of Ecuador, made through administrative acts executed by public sector officials: if the claim of unconstitutionality deduced before the Constitutional Court; or, the constitutional protection remedy.

Regarding the presentation, processing and final resolution by the Constitutional Court, in the exercise of the remedy of amparo, there have been notable contradictions, stemming from the lack of understanding and ignorance of its true meaning, both by the actors and the magistrates, especially in times that still feel recent and that fortunately have been overcome, as evidenced by the Constitutional Court's resolutions in the current era.

There has also been confusion and undue application of the spirit of the remedy of amparo as a constitutional means to achieve respect for the guarantees of human rights set forth in the Constitution.

Regarding the exercise and resolution of the unconstitutionality claim, it could be said that there has been no major controversy.

That is why, only with a proper understanding and application of the means that the Constitution itself indicates, will be obtained the experience of the constitutional guarantees established in the Fundamental Charter in favor of the rights of the person and the responsibility and custody of the same on the part of the State, as an effective response to the social clamor of preserving the constitutional norm in the main seat within the state legal order, since no norm of inferior hierarchy can contradict it and therefore the unilateral manifestations of public authority must keep absolute harmony with the constitutional and legal order.