Diferencias de género en el conflicto trabajo familia y su impacto en la salud de la población trabajadora de Ecuador

Abstract

Examinar las desigualdades de género en la relación del conflicto trabajo familia (CTF) con el estado de salud de la población trabajadora con empleo formal de Quito y Guayaquil. Métodos: Estudio transversal utilizando datos de la I Encuesta sobre Condiciones de Seguridad y Salud en el Trabajo de Quito y Guayaquil (I ECSST). Incluyó 1729 personas de la población trabajadora no agrícola, mayores a 18 años, afiliadas a la seguridad social y residentes en Quito y Guayaquil (854 mujeres y 875 hombres). Se utilizó el modelo de regresión de Poisson para calcular las razones de prevalencia con intervalos de confianza del 95%. Resultados: La prevalencia de CTF es similar en hombres y mujeres (36,1% y 35,5%). Más hombres que mujeres trabajan más de 40 horas semanales (31,4% y 19,4%) y en turnos nocturnos, rotativos o extendidos (35,1% y 23,1%). Sin embargo, se encontró mayor asociación con el CTF para las mujeres que trabajan más de 40 horas (RPa=2,08; IC 95%: 1.15-3.76) y una asociación similar para ambos en turnos nocturnos, rotativos o extendidos (RPaH= 1,36; IC 95%: 1,08-1,73 y RPaM= 1,44; IC 95%: 1,16-1,79). El CTF se asoció con la percepción de que la salud está afectada por el trabajo (RPaH= 1,60; IC 95%: 1,29-2,0 y RPaM= 2,14; IC 95%: 1,69-2,71), mala salud mental (RPaH=1,95; IC 95%:1,38-2,76 y RPaM= 2,30; IC 95% 1,71-3,10), dolor de cabeza (RPaH=1,37; IC 95%: 1,16-1,63 y RPaM= 1,52; IC 95%: 1,30-1,76) y dolor de espalda (RPaH=1,20; IC 95%: 1,05- 1,37 y RPaM=1,38; IC 95%: 1,23-1,55). En las mujeres, se asoció también con problemas 7 digestivos (RPa=1,72; IC 95%: 1,23-1,41). En ninguno de los dos sexos se observó una asociación estadísticamente significativa con los accidentes de trabajo. Conclusiones: Se identificó una clara relación entre el CTF y alteraciones en la salud de la población trabajadora, particularmente en las mujeres. Se asoció principalmente a turnos nocturnos, rotativos o extendidos y a trabajar más de 40 horas. Esta realidad requiere una efectiva implementación políticas públicas enfocadas en favorecer las condiciones de trabajo y la calidad de vida de los trabajadores.